Queremos mostrar, especialmente este día, nuestro rechazo hacia las desigualdades, las violencias machistas, la precariedad, el racismo, los modelos de sexualidad rígidos y excluyentes, la división sexual del trabajo, los modelos de consumo, educación y familia hegemónicos y todas aquellas situaciones que, lejos de poner la vida en el centro, oprimen y violentan la vida de las personas y destruyen el medio ambiente.
El cooperativismo hace hincapié en valores como el apoyo mutuo, la igualdad y equidad, la solidaridad, la democracia …, es un movimiento comprometido con el bienestar de las personas, las que están en el centro de la actividad económica (no el lucro), por lo que cuestiona las lógicas capitalistas y patriarcales. No se puede desvincular el cooperativismo del fomento de la igualdad o la equidad de género, ni tampoco de la revisión de las relaciones de poder entre hombres y mujeres. Respondemos desde el cooperativismo cada día construyendo una economía hecha por personas y para las personas.
Por todo ello, tal día como el 8 de marzo, apoyamos la huelga de la siguiente manera:
. Difundiendo la convocatoria y el manifiesto a través de nuestros canales de comunicación.
. Trasladando el argumentario de la huelga a las personas con las que trabajamos en los diversos proyectos comunitarios relacionados con la sostenibilidad, la brecha digital, la gestión de equipamientos, el realojamiento, la moneda social, etc.
. Deteniéndonos en nuestra actividad laboral el 8 de marzo para hacer notar que “Paramos para cambiarlo todo”.
Y también haciendo huelga formalmente, las personas miembros de la cooperativa que así lo han decidido.
